El 25 de julio suele ser el día de la Clásica de Ordizia y este año tampoco ha faltado a su cita, siendo Abaltzisketa uno de los puntos fuertes del día.
Hasta cinco veces han pasado los ciclistas justo al lado de Logikaline y como todos los años el público ha respondido muy bien, aunque este año ha coincidido con el Tour de Francia, y por ello han faltado algunos corredores de renombre. Pese a ello, ha habido muchísimo público animando a los corredores en toda la subida a Abaltzisketa y también a las puertas de Logikaline, al igual que en el bar Ermentañe, que como su terraza, ha estado abarrotado de gente hasta bien entrada la tarde.
Un año más el público ha disfrutado de la naturaleza y del buen tiempo mientras veía a los ciclistas.